Renata
Lucía Rostro



Sí,
como siempre,
el asunto es la esperanza,
antes no, pero esta puede ser
encontrar una flor buena para contemplarse
y afinar el alma,
tal vez ahora las precauciones y la experiencia gobiernen
y las cosas sean como debieron ser a la primera
a la una
a las dos
a las tres: no me rompan
a Renata
ni un pelo
ni un chiste,
esmérate geranio,
margarita, resiste deshojadas
que no es maldad
sino incertidumbre
no rajes las palabras
bisturí, tenemos mucho
que contarnos,
de por sí
mis palabras cortas
apenas alcanzan
a iluminar la brecha
por la que
inevitablemente
mis amigas
andan solas.



Lucía Rostro.
Guadalajara, México.